La aventura de buscar casa en Sidney (I)
Cuando la confusión de los primeros días se disipa y ya nos hemos cansado de dormir en el backpackers de turno y de revolver toda la maleta para encontrar un par de calcetines comienza la aventura de buscar casa.
Una muy buena opción si estudias en Sidney es alojarte en alguna de las residencias de tu universidad. Aunque siempre puedes encontrarte alguna sorpresa a la llegada, suele garantizar una buena relación calidad-precio (con respecto a los precios de la vivienda en el centro de la ciudad), montones de fiestas internacionales que harán que te integres en el entorno universitario mucho más rápido y no tengas ni un solo momento para sentirte homesick. Las residencias suelen organizar actividades de todo tipo y para todos los gustos, desde salidas en grupo, clases de cocina, yoga y meditación hasta clases para mejorar tu inglés.
Si esto no es lo que tienes en mente, las opciones son muchas y los precios de los más variado.
Como ocurre en la mayoría de las ciudades, cuanto más cerca del centro más se encarecen los precios. También hay zonas específicas que son más caras y otras más baratas en el mismo centro. Por ejemplo, será más fácil encontrar una habitación barata en la zona de China Town que en Pyrmont, pero también depende de a qué lujos estamos dispuestos a renunciar y en qué condiciones queremos vivir.
Compartir habitación o roomshare es la perfecta alternativa para vivir en una buena zona sin tener que vaciarte los bolsillos. Es muy común y se pueden encontrar desde habitaciones dobles hasta auténticos profesionales del Tetris a la hora de colocar camas en un cubículo. Con opciones como éstas puedes permitirte vivir en apartamentos de lujo, como puede ser el caso de la World Tower, donde permiten arrendar legalmente un piso de tres habitaciones hasta a seis personas. Luego los más creativos se las arreglan para hacer particiones en el salón o alquilar la terraza, lo que nos lleva a otro punto a la hora de buscar piso. Las particiones. Ojo con esto pues es una práctica muy común y los precios son muy similares a los de una habitación normal sin que las comodidades sean las mismas. No todo el mundo está dispuesto a levantarse por la mañana con el olor a fritanga de un roomie trasnochador que se puso a cocinar al volver de fiesta.
El transporte en Sidney no es especialmente barato pero el centro de la ciudad no es demasiado grande y la red de autobuses es buena. Alejarse relativamente del centro puede incrementar nuestra calidad de vida y zonas como Glebe, SurryHills y Newtown son una buena alternativa.
Vivir al lado de la playa, para surfear cada mañana antes de ir a la universidad o hacer algo de footing a través de la ruta Bondi-Coogeebeach y deleitarte con las increíbles vistas en una elección muy válida y popular entre los estudiantes internacionales. Los precios varían y se puede encontrar alojamiento asequible aunque no hay que olvidar el tiempo y gasto de transporte.
Continuará…
Con esta entrada me han dado ganas de coger mi maleta y plantarme en Australia…¡qué envidia!
Muchas gracias por este post, Irene. Me ha resultado muy útil. Espero ser pronto vecino vuestro 🙂
Muy interesante… ¡Muchas gracias por la info Irene!
Me proclamo seguidora de este blog
Me alegro de que os haya servido de ayuda este post 🙂